A través del siguiente informe realizado por el despacho de abogados GVA GÓMEZ-VILLARES & ATENCIA, se expone cómo Colombia presenta en la actualidad un escenario ideal para realizar inversiones, concretamente en los sectores de la infraestructuras, la banca, la innovación, el turismo y la agroindustria. El informe se apoya de los datos y aportaciones de Organismos Oficiales que refutan la afirmación que Colombia es un destino muy importante para España, ofreciendo seguridad jurídica, garantía y seriedad.
Según Nuria Vilanova, presidenta del Capítulo Ibérico del Consejo Empresarial de América Latina (CEAL) “otra de las condiciones que valoramos muchísimo en Colombia es el equipo humano. Hay personas muy bien formadas y con actitud positiva; eso es una ventaja para el desarrollo del país”.
Por su parte, el Jefe de Estado colombiano, Juan Manuel Santos, destaca que la inversión española en 2014 creció un 127% frente al 2013 y llegó a los 2.154 millones de dólares -especialmente en infraestructura, banca, seguros, telecomunicaciones, medios y turismoconvirtiendo a España en el tercer país que más invierte en Colombia.
Un país como España, que hasta finales de los años ochenta era básicamente receptor de inversiones extranjeras, llegó a convertirse en el mayor inversor en América Latina en los años 1999 y 2000. La profunda metamorfosis que sufrió la economía española en apenas una década obedeció a la necesidad de incluir al país dentro de las dinámicas de la globalización
económica que se estaban desarrollando. En la actualidad, España se ubica entre los principales inversionistas en Colombia, con más de 300 empresas operando en el país.
Entre los años 2000 y 2015 el flujo acumulado de inversión directa de nuestro país ha sido de 9.990 millones de dólares. De esta manera España se ubica entre los mayores inversionistas que contribuyeron con el 45% del flujo acumulado de inversión directa en Colombia -un total de 53.900 millones de dólares durante ese período-.
Asimismo, se han de tener en cuenta los esfuerzos asumidos por el conjunto de la sociedad colombiana, que ponen de manifiesto la voluntad por superarse y seguir avanzando.
Concretamente, se han centrado en el diseño de planes estratégicos a largo plazo, con miras a dotar al país de mayor estabilidad, paz y prosperidad, cuya implementación ha dado comienzo, y pronto, se confía, dará sus frutos. Se trata de una planificación estratégica que ha sentado las bases para la creación de un ecosistema puntero y favorable para la inversión en el país. Estos esfuerzos han permitido a Colombia ascender nueve puestos en el ranking de inversión 2015, elaborado por el Banco Mundial y lo han situado como el destino con mayor facilidad para hacer negocios en América Latina.
Factores que fomentan la inversión
• Acuerdo comercial con la UE. Colombia tiene 10 acuerdos comerciales y 3 acuerdos de alcance parcial vigentes, que permiten al país tener acceso preferencial a más de 45 países; entre éstos se sitúan los de la Unión Europea, que mantiene un acuerdo de libre comercio con Colombia, en el que se suprimen las barreras comerciales para favorecer la inversión y los intercambios comerciales con el país sudamericano.
• Mano de obra cualificada y competitiva. Según el ranking IMD (2015), Colombia tiene la mano de obra más cualificada de Sudamérica, superando a países como Brasil, Chile, Perú, Argentina o Venezuela.
• Normativa favorable. Favorece la inversión extranjera y el buen desarrollo de los negocios, los sucesivos gobiernos colombianos han llevado a cabo hasta 29 reformas en los últimos diez años. El resultado: el impulso de una legislación liberal y flexible en materia de intercambios comerciales y de negocios. Además, la voluntad política de ofrecer incentivos para la inversión y de garantizar la estabilidad para inversionistas constituye un compromiso político tomado por los distintos gobiernos que se han sucedido en el poder.
• Facilidad para hacer negocios. De acuerdo con el informe Doing Business de 2015 del Banco Mundial, Colombia se sitúa como el décimo país a nivel mundial y el primero en América Latina en proteger a los inversionistas. Además, las agencias de calificación Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch mantienen el grado de inversión para el país confiando en la solidez de su deuda soberana.