A través de los cursos de GVA Scholae, sus abogados actualizan conocimientos y acceden a documentación complementaria para su desarrollo profesional
Disponer de un equipo en continua formación para alcanzar la excelencia que demandan y merecen los clientes. Con esa premisa, GVA Gómez-Villares & Atencia cuenta entre sus atributos con la marca GVA Scholae, un espacio de formación interna para los profesionales del despacho en donde adquirir conocimientos adicionales y aumentar su capacidad de respuesta ante los distintos casos que se presenten en el desempeño de su labor.
Nacida en junio de 2019, GVA Scholae es una escuela de formación continua “que en bufetes medianos como el nuestro, pone de relieve unas firmes convicciones por parte de la marca para garantizar calidad y polivalencia en la preparación sus trabajadores”, afirma el socio del despacho y abogado Andrés Reina Agero, quien resalta el “significativo esfuerzo que realiza GVA Gómez-Villares & Atencia para la buena marcha de este espacio de formación interna”.
En efecto, GVA Scholae permite a los abogados de la plantilla el acceso libre a un verdadero espacio de material formativo para su crecimiento en las distintas materias del Derecho: charlas, clases magistrales, artículos, sentencias… Un lugar de formación integral, que se encuentra dividido en dos parcelas bien diferenciadas.
De una parte, GVA Scholae ofrece hasta tres cursos mientras que por otro lado, cuenta con el RIC: un Repositorio Interno de Conocimiento
De una parte, se hallan los propios cursos, tres en total: Formación Jurídica, Desarrollo Profesional y Cumplimiento normativo, interno y protocolo.
En el curso de Formación Jurídica, los trabajadores podrán acceder a variado contenido formativo tocante a las distintas áreas del Derecho: Civil-Mercantil, Laboral, Tributario, Bancario, Penal o Administrativo. En cuanto al curso de Desarrollo Profesional, se ofrecen claves para la adquisición de habilidades sociales y comerciales.
Finalmente, en cuanto al curso de Cumplimiento normativo, interno y protocolo, el trabajador encuentra todas las formaciones obligatorias que exige la profesión de abogado.
Por otra parte, GVA Scholae acoge otro espacio: el RIC o Repositorio Interno de Conocimiento. A través del mismo, los docentes comparten documentos que pueden resultar de interés y apoyo en el desempeño de la abogacía. Jurisprudencias, sentencias o sesiones formativas integran esta sección, también dividida según áreas del Derecho.
Con una periodicidad bisemanal aproximadamente, GVA Scholae va incrementando los contenidos de esta escuela de formación. A través de un sistema de mailing interno, un boletín titulado Horizonte Scholae, los profesionales del despacho se encuentran puntualmente informado de cada una de estas actualizaciones.
En palabras de Reina Agero, GVA Scholae “permite que los abogados del bufete, ayudados por un selecto grupo de tutores, actualicen sus conocimientos técnicos, analicen estrategias en el laboratorio de ideas, practiquen la disciplina profesional, y ejerciten las habilidades que luego pondrán a disposición de sus clientes”.
Cinco abogados del despacho forman el equipo de profesionales de GVA Scholae, junto a los propios tutores y las firmas invitadas
El equipo de profesionales de GVA Scholae, todos pertenecientes a la plantilla de GVA Gómez-Villares & Atencia, está conformado por Ana Hidalgo Díaz, Ignacio Laín Corona, Joaquín Pérez-Muñoz Molina, Andrés Reina Agero y Nieves Salvatierra Ruiz-Mantero; además de los propios tutores y las firmas invitadas para puntuales formaciones periódicas.
La abogada del despacho, Ana Hidalgo, comenta al respecto que desde GVA Gómez-Villares & Atencia “nos tomamos muy en serio la formación de nuestros profesionales. Como empresa de servicios, sabemos que son nuestro mejor capital”.
Para Hidalgo, GVA Scholae “es una manera de imprimir en los abogados un sello de calidad; si no nos ocupáramos de que ellos, que son nuestros abanderados, fueran los mejores en su especialidad, no podríamos sobrevivir a los retos del mundo actual”.
GVA Scholae, además, “es una forma de búsqueda de la excelencia y una manera de reinventarse como profesionales siendo, hasta donde sabemos, una respuesta innovadora, al menos en nuestro entorno cercano, que nos debe permitir llegar allí donde la competencia no puede hacerlo, prestando mejores servicios que otros, sin que necesariamente ello repercuta en el precio que ofrecemos a nuestros clientes”, precisa Ana Hidalgo, quien concluye que GVA Scholae “no solamente nos hace mejores, también nos hace más competitivos”.
